A Michèle Alliot-Marie (aka MAM) las Revoluciones en el norte de África le sientan fatal. Vamos, que la diplomacia no es lo suyo. No pasaría nada, si no fuese porque es ministra de Exteriores.
Con Túnez se cubrió de gloria. Horas antes de la estrepitosa caída y posterior huída de Ben Alí, la ex ministra del Interior ofreció al régimen la ayuda de Francia para «restablecer el orden».
En concreto propuso poner el «saber hacer» de las Fuerzas de Seguridad francesas «reconocido en el mundo entero» (temblores) al servicio de los dos países, Túnez y Argelia (donde también se estaban produciendo manifestaciones).
Gran polémica, avalancha de críticas ante la falta de delicadeza… Por razones históricas, cualquier declaración de Francia sobre sus ex colonias es muy sensible. Esto fue el 11 de enero. El 14, Zine El Abidine Ben Ali, hacía las maletas y abandonaba el país por la puerta de atrás. Error nº1.
El 18 nos enteramos de que una empresa francesa tenía preparado un cargamento de material antidisturbios con el Ministerio del Interior tunecino como destinatario. Según las aduanas francesas no fue entregado por razones administrativas, no políticas. Error nº2.
Sobre la revuelta en Egipto el Gobierno francés (como el resto de la Unión Europea) ha mantenido un riguroso silencio. A Michèle Alliot-Marie le habrán puesto una mordaza para que no le dé por ofrecer el saber hacer de la policía francesa.
Pero Le Canard Enchaîné, que más que un semanario satírico es el WikiLeaks de las Galias, una institución periodística que ni se molesta en tener página web, ha soltado el bombazo.
Cuando calienta el sol aquí en la playa
Alliot-Marie se fue de vacaciones a Túnez en navidades, como tantas otras veces.
La cosa es que viajó en el jet privado que le ofreció el empresario Aziz Miled y se alojó en un hotel de Tabarka también regalado por Miled, exiliado en Canadá y con sus cuentas en Suiza bloqueadas por su cercanía a los Ben Alí. Todo esto mientras los tunecinos ya habían comenzado a manifestarse contra el régimen. Error nº3.
Primero lo negó. Error nº4. Luego lo reconoció diciendo que no había pensado las consecuencias. Error nº5. Luego dijo que en realidad Aziz Miled no era próximo a Ben Alí sino una víctima a la que el régimen sacó la pasta. Error nº6. También dijo que el viaje no costó nada al contribuyente. Evidentemente no es la cuestión. Error nº7. Luego dijo que cuando estaba de vacaciones no era ministra de Exteriores sino ‘citoyenne’. Error nº8.
Finalmente ha reconocido que ésto último era una chorrada, ha reconocido que el viaje «puede resultar chocante» y ha prometido que no lo volverá a hacer.
Ya se ha convertido en la Reina del ‘Twittoscope’, el sondeo político en Twitter que han lanzado Sofres, la tele TF1 y el gratuito Metro. El periodista Pierre Haski, dire de Rue89 y ex Libération, rebautizó su cargo: de ‘Ministre d’Affaires Etrangères’ a ‘Ministre Étrangère aux Affaires’.
Y apareció Fillon. Este Gobierno no da descanso a los blogs con tanto ‘affaire’. Todavía andamos preparando el post.
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Es que no hay nada como la «visión política» http://us.123rf.com/400wm/400/400/jorgosphotos/jorgosphotos1010/jorgosphotos101000319/8036732-visiones-de-fuego-grabaci-n-desde-el-ojo-de-un-jefe-de-hechiceros-scorched-en-una-aparici-n-fiery-fr.jpg
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